



Esta pulsera de ágata turquesa es un amuleto de armonización energética y protección sutil. En la tradición esotérica, el ágata turquesa actúa como un canal de paz interior, ayudando a aquietar la mente, liberar tensiones emocionales y favorecer la comunicación consciente. Su energía suave acompaña procesos de sanación, equilibrio espiritual y conexión con la verdad interior, envolviendo el aura en una vibración serena y protectora. Ideal para llevar como talismán diario de calma, claridad y bienestar espiritual.